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Estad Quietos...

Estad quietos, y conoced que yo soy Dios
Salmos 46:10

En este tiempo el estar extremadamente ocupado es una marca de honor. Contestamos nuestros teléfonos celulares en los restaurantes (y a veces en la iglesia), contestamos el email en el parque mientras estamos con nuestros hijos, y ponemos la última película de Disney mientras vamos de camino al supermercado para “aprovechar el tiempo”. Pero estar extremadamente ocupado es una enfermedad devastadora para nuestro tiempo personal.

Cuando permitimos que nuestra agenda saturada estorbe nuestras vidas, fallamos en última instancia en desarrollar las grandes posibilidades y sueños que se pueden alcanzar en nuestra vida.

La mejor forma de aliviar nuestro tiempo está primero en pasar tiempo con el autor del tiempo. ¿Cuándo fue la vez última que tomastes un tiempo para estar delante de la presencia de Dios? Sin teléfono celular, sin email, sin televisión, ni radio.

Si estas tomando en serio alinear tus prioridades con el propósito de Dios para tu vida debes aprender a buscar la presencia de Dios. Se estratégico. Busca un lugar y separa un tiempo donde puedes hablar con Dios y enfocarte en la voluntad de Él para tu vida. Separa un tiempo en el día para enfocarte solamente en los que Dios quiere hablarte y no en tus propias agendas.

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